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Los candidatos a futuras dietas de adelgazamiento deben ser conscientes de que perder peso es un proceso, no un milagro de la noche a la mañana.
Hay que trabajar y esforzarse si se quieren obtener resultados satisfactorios. Saber perseverar es una verdadera ventaja, porque nada en la vida puede hacerse por capricho.
Así que nunca se precipite y deje que el tiempo le ayude a perder kilos. Pero como muchos de ustedes se preguntan: «Quiero adelgazar rápido. ¿Qué debo hacer? He aquí algunos consejos que os ayudarán…
Perder peso rápidamente es sinónimo de perder entre 500 gramos y 1 kg a la semana de forma permanente, según los nutricionistas especializados. Perder más de esa cantidad, por ejemplo 5 kg en una semana, ya no es adelgazar, sino matarse. Este tipo de dieta restrictiva y demasiado ambiciosa no funciona a largo plazo. Peor aún, provoca el efecto contrario, un mayor aumento de peso. Es lo que se conoce como «efecto yo-yo», y puede ser desmotivador, baja la moral y desgasta el organismo.
Para perder peso de forma sana y segura, hay que respetar el tiempo y los límites del cuerpo. Se necesita tiempo para alcanzar un peso estable. Adelgazar rápidamente es sinónimo de adelgazar mal.
Para empezar, el primer paso es fijarse objetivos realistas, alcanzables y lógicamente viables. Estos objetivos deben tener en cuenta su perfil, su personalidad y su masa corporal, para eliminar cualquier peligro para su salud.
Para quemar las calorías y las grasas ingeridas, es necesario poner el cuerpo en movimiento mediante la actividad física (correr, hacer footing, nadar, etc. ….). El ejercicio físico es un medio eficaz para perder peso, siempre que se realice con regularidad. Según los especialistas, hay que procurar hacer al menos 30 minutos por sesión y tres sesiones a la semana.
El deporte ayuda a exfoliar la celulitis, esculpir el cuerpo y, sobre todo, reafirmar la figura.
Es importante tener en cuenta que la actividad que practiques debe adecuarse a las capacidades de tu cuerpo y, sobre todo, nunca debes forzarte a realizar una actividad que lleve a tu cuerpo al límite. Por este motivo, es aconsejable realizar ejercicio físico a tu propio ritmo, cuya intensidad dependerá de tu forma física.
Bebe mucha agua y tómate un descanso después del ejercicio para recuperar fuerzas.
El agua hidrata el cuerpo, lo calma y ayuda a que funcione mejor.
Como sin duda sabes, la grasa es tu enemigo número UNO. Ordena tu alimentación, opta por las no grasas y prefiere las grasas vegetales a las animales. En el mismo contexto, comer frutas y verduras frescas es mucho mejor que comer alimentos ricos en grasas. Deben evitarse los dulces como el chocolate, que no sea negro, y las golosinas.
También es buena idea una dieta con el menor número posible de almidones, sin azúcares añadidos ni grasas animales procedentes de la carne. Tienes toda una gama de opciones: claras de huevo, productos derivados de la soja, pechuga de ave sin piel, pescado, marisco, productos lácteos sin grasa, carnes magras, etc.
Para perder peso rápidamente, es esencial no saltarse nunca el desayuno, la comida más importante del día. El desayuno proporciona al cuerpo la energía que necesita para afrontar el largo día que le espera. Es la primera comida después de toda una noche de ayuno, y su primera fuente de energía.
Para adelgazar de la forma más sana y segura, toma nota de los consejos anteriores. Y para acelerar el proceso y ahorrar tiempo, opte por un producto sintético a base de ingredientes naturales, el PhenGold por ejemplo.